La Lengua de Signos

¿QUÉ ES LA LENGUA DE SIGNOS?

Es una lengua natural que aúna las siguientes características:

Visual: la vía sensorial por la que entra la información es la vista, al contrario que en las lenguas orales donde la vía principal es el oído.
Gestual: se utilizan las manos, el cuerpo y la expresión facial.
Espacial: los gestos realizados ocupan un lugar en el espacio.
Con gramática propia: como cualquier otro idioma, por ejemplo, el castellano.

Las ventajas de la LSE

Permite adquirir una base sólida de comunicación si se utiliza como primera lengua para posteriormente adquirir la lengua oral.

Si se utiliza precozmente, favorece el desarrollo de la organización neurológica responsable del lenguaje.
Su aprendizaje es espontáneo y natural.
Supone un desarrollo más rápido del lenguaje.
Incrementa la madurez y la competencia social.
Permite todo tipo de expresiones y de significados.

¿Cuántas Lenguas de Signos hay reconocidas en España?

Sólo 2, la Lengua de Signos española y la Lengua de signos catalana. Ambas están reconocidas mediante la ley estatal 27 / 2007.

Andalucía y la Lengua de Signos

En nuestra comunidad autónoma se ha creado la Red Andaluza de Enseñanza de la Lengua de Signos Española (RedALSE) a la que pertenecen numerosas asociaciones y centros de las distintas provincias de Andalucía. Todas ellas trabajan para actualizar y mejorar la calidad de la enseñanza de la lengua de signos española y ofrecer formaciones flexibles con la finalidad de expandir la lengua de signos por todo el territorio.

En Sevilla destaca la Asociación Cultural de Personas Sordas de Sevilla (ACSS), la cual podemos encontrar en: C/ Castellar, 71, 41003, Sevilla.

El trabajo del logopeda con la Lengua de Signos

La lengua de signos puede funcionar de forma diferente según el uso que se le da.

Lengua de signos como sistema alternativo: cuando la lengua de signos es el único medio de expresión.
Lengua de signos como sistema aumentativo: cuando la lengua de signos permite aumentar la eficacia y/o rapidez del lenguaje oral, pero limitándose a la estructura básica del idioma utilizado por el entorno.

Entonces, ¿para quién está destinada la lengua de signos? Para cualquier persona cuya expresión por vía oral no sea eficiente y necesite de la lengua de signos para enriquecer y complementar lo que comunica y, en otros casos, cuando no haya existencia de lenguaje oral. Ejemplos de ello son; personas con Discapacidad Auditiva (DA), Parálisis Cerebral (PC), Trastorno del Espectro Autista (TEA), entre otros.

¡No obstante, cualquier persona que se comunique por vía oral también puede aprender lengua de signos!

Nuestra visión en ATEMPRA

Desde ATEMPRA animamos a todas estas personas a aprender y expandir esta lengua tan necesaria que, aunque no se la escuche, también tiene mucho que contar.